viernes, agosto 26, 2005

Fe en viernes de promesa.

A mi no me gustan los días así tan oscuros. Esta mañana estuvo toda fea, como amurrada, igual que yo y mis ganas de viernes. Aparte que de verdad no tengo ningunas ganas de ir a la pega 2, porq esta semana nuevamente apareció el viejo odioso desgraciado para molestarme. Viejo de mierda. Me da rabia cachar que a estas alturas de la vida y con todo lo que ha pasado en el país, sigan existiendo déspotas. En realidad me da pena, entonces desde el miércoles que quedé sentida y absurda, y no hay caso q me importe poco y me de lo mismo. Viejo de mierda me amarga cada vez que me acuerdo de él.

El Cura me dijo ese día que si yo le daba importancia y me daba el odio y la rabia y la venganza, yo no más iba a sufrir y la tontera. Pero de verdad, más que rabia-odio-venganza me da profunda pena tener q coexistir con ese individuo de la puta.


Pena-Rabia.

Entonces por eso no pienso ir a la pega 2 y me vine para mi casa, además porque tengo q hacer unas pegas que no pienso hacer sábado ni domingo. Y por lo demás porque tengo que dormir una exquisita siesta. Con calientacama, que rico.

Yo, que no creo que exista Dios padretodopoderoso, tengo un amigo Cura. Y él sabe de mi no-fé y aunque me busca la conversión y todo, no me trata como monstruo ni esas cosas. Me gusta conversar con él, sobre todo, el tema de mi rabia con el mundo. Que al final, no es tanta rabia como pena. Es divertido el Cura, me dice que rece por el viejo desgraciado para que se haga buena persona. Ojalá una a puros rezos solucionara las cosas.

Me gustaría tener fé porque siento que la gente que cree harto es más feliz. Porque a todas sus cosas le pone explicación y solución con Diosito y la Virgen, y listo. Y ante la adversidad y la imposibilidad de cambiar ciertas cosas, hace mandas y procesiones y así siente que en realidad está "haciendo algo".

"Dios lo quizo así". Y se acabó la lesera.

En cambio uno que se pregunta a cada rato por qué esta cosa, por qué no otra, y no encuentra respuestas, se pone triste y mañosa. Es importante eso de la fé, de verdad quisiera tener yo de eso.

Pero por más que tomo cafeses con el Cura, no hay caso que me entienda con Dios. Debe ser que me va mejor con los humanos. Bueno, con algunos humanos.

En realidad, con las mascotas.